
Ahora, todo lo que hago, cuando como, cuando duermo, cuando voy a trabajar, se convierte en días de reflexión.
Miro hacia las montañas de alrededor de mi casa y pienso en Alaska, cuando esté dentro de esa gran maravilla, dura, fría pero a su vez, con un encanto especial.
Tengo ganas de sentir el ruido de la nieve debajo de mis pies al pasar con mi bici, tengo ganas de oler, de mirar y de saber lo que es el estar allí, de aprender...
"ALEGRÍA DE VIVIR!!!!"
3 comentarios:
Ánimo guapa, que ya queda poco para esa gran aventura. Espero que cuando vuelvas las viejas montañas de España no se te queden pequeñas.
Ya falta menos para la gran hazaña....
Gracias compañeros. Un besazo!
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