La Sagra SKY RACE 2013

Petra-Isabel-Sara-Nuri

AHI LA TENEMOS !!! Esa preciosa montaña que se encuentra en un pueblecito del norte de Granada. 

Hacía un año que tenía ganas de trotarla, de subir por esa ladera ... y como todo lo que deseamos se cumple, pues ahí estábamos, mi Josito y yo.

Domingo 15 de septiembre, que amaneció entre "turbulencias humanas" y calor. 

Yo, ya sabía que iba a pasar calor, pero esta vez, no me importaba. 

Tengo que entrenar para la BOTAMARGES, así que haga el calor que haga, pienso disfrutar esta carrera, subir hasta la cima de La Sagra (2.383 m) y luego, bajar esos últimos 5 km y 500 metros con esa alegría de vivir que me caracteriza. 

Llamamos al resto del personal que faltaba por venir y quedamos con ellos. Los nervios los teníamos a flor de piel, unas más que otras, pero ahi estábamos las tres espartanas y nuestra Nuri, que nos haría de apoyo logístico y de fotógrafa. 

COMIENZA UN NUEVO RELATO dónde vosotros, mis lectores, sois los protagonistas de esta historia... va por todos ustedes!!

9: 00 de la mañana, suena la salida entre voces y aplausos, entre gritos del señor que  no hace más que hablar y hablar, por dios, jaaaa... que se va a ahogar, pero respiraaaa... y de repente dice "vamos SKYRUNNER'S, que, hoy vais a tocar el cielo!", que emoción. 

Los primeros kilómetros, serían asfalto, hasta la salida del pueblo. Solo tenía que aguantar... y por fin, pista. 

Vamos Isabel, comienza la gran fiesta. A un ritmo de caminar, trotar, caminar y sudar, me planté en el primer avituallamiento, sito a una altura de 1.800 metros. Ya llevaba los primeros 6.400 metros de esta carrera, Cumbre del Calar. Hora 10.10 de la mañana. Alli estaba Héctor esperando a Petra; agarré algo de chuches y seguí. Toca bajada, una bajada bastante técnica dónde muchísima gente se quedaba atascada. Entre "paso paso" y un ritmo de bajada cómodo, me planté en el segundo avituallamiento. Sarita acababa de pasarme, iba perfecta. La chillé CHURRI guardame el bocata de chorizo, eh!!! Serían las 11 horas cuando pasé ese segundo avituallamiento sito en el cortijo Jorquera. Ahora, vamos a aguantar un poco más, no pienses en lo que te queda, piensa en que en nada de tiempo estarás en el siguiente avituallamiento. 

Asi que concentrada en los pasos, en la respiración y disfrutando del día, me encontré con un riachuelo, verde, una zona preciosa entre fuentes y muchísima gente y ahi estaba la Nuri. Esperándo a que pasásemos... Me contó que Josito y Sara ya habían pasado, que iban muy bien y eso me dió fuerzas y mucha alegría. Me pregunto por Hector y Petra y la dije que venían detrás. Voy bien, voy muy bien... esperame en la meta... me abrazó y jolines, me vino mejor que ese gel de cafeína que me estaba tomando... así que, entre la alegría de poder abrazar a gente que conoces y la emoción de que iba cara a conquistar la cumbre de la Sagra, comencé a cantar... mi pasó era ligero y mis piernas estaban perfectas... calor? yo no tenía calor... asi que, llegue al siguente avituallamiento, al final de una pista desde donde se oian a los que iban llegando a la meta. Estaba ya en el kilómetro 19 y el sol lo tenía en todo lo alto. Comencé una subida entre pinos y sombra y de ahí, la sierra pelada. Al cabo de unos minutos, Jaime Antón en el avituallamiento de Zamarrillas. 

Me preguntó que que tal iba y le dije que fenomenal, que no me dolía el piramidal y que la estaba disfrutando muchísimo, a mi ritmo, pero muchísimo... venga, que ahora te vuelvo a ver. Comence a subir, esa zona ya me la conocía, sabía que ahora venía lo peor, así que chupé un poco más del gel que tenía guardado y pa rriba... hasta que, pedruzcazo!!!

No voy a añadir nada más, solo que hay gente que tenía que saber que correr por montaña es RESPETAR no solo a la naturaleza sino a la gente que llevas detrás. Así que, una enorme piedra, rebotó en mi pié derecho con tan mala suerte que me hizo muchisimo daño. comenzó a hincharseme y yo comencé a marearme. 

Detrás de mi, venia un señor que era enfermero. Me apretó el bulto y casi me da algo, que dolor!!! corre, sigue corriendo, me gritaba... pero yo apenas podía mantenerme de pie; entre arcadas y respiración entrecortada, segui subiendo...y llegué a la cima de la Sagra. 

Alli estaban dos amigos del RETO EVEREST a quien tengo que agradecer su apoyo, palabras y manos. Gracias Vicente y gracias Alberto...  Entre todos, me animaron y con el pie vendado, comencé a bajar. 

Mis ojos se llenaron de lagrímas, ya que no iba a entrar dentro de las 5 horas y 30 minutos, se me había ido de tiempo y me dio muchisma rabia. Pero ahora, lo importante era tener cuidado en esa bajada y llegar a la meta.

Volví a pasar por el avituallamiento de Jaime y me dijo, "que te ha pasado?, porque has tardado tanto? y cuando me vio el pie,  se hechó las manos a la cabeza. Vas a seguir? y yo le contesté, por supuesto.... asi que, bebí un poco de agua, le dí dos besos y comencé a bajar.

Que bajada más técnica, más dura, más mala que pasé... no hacía más que golpearme en el tobillo, que tropezarme... jolines!!! gritaba... 

Y como siempre, la putada de la carrera... esos cerca de 800 metros interminables y feos. 

Pero: que necesidad había de colocar esto? por favor, que últimos metros más feos, coño!!! y super enfadada, pasé por el arco de meta. 

Alli estaba Nuri y Sara. Cuando me vieron llegar, nada más verme llegar, sabían que algo me había pasado... y en fin, que ni me duché, ni comí, ni disfruté del podium de la Sarita, ni na de na. 

De ahí, a la ambulancia y al hospital de Baza. 

La suerte, que no tenía nada roto... Siento muchísimo que Jose tampoco disfrutara de la comida ni de los amigos. El pobre, tuvo que ir a buscarme al hospital... y entre risas, porque me habían puesto una escayola, sin tener na de ná, sino un contusión de camión, llegamos a Elche. Llevamos la bici a la casa de Jaime, me quité la escayola, hablamos un poco y a la ducha, que creo que huelo un poquito mal, por que será? jaaaaa

Así que, serían las 23 horas, cuando estábamos sentados, frente a frente, devorando una hamburguesa en el McDonals... lo único que estaba abierto, si si si ... os lo prometo, LO ÚNICO. 

En fin, que colorín y colorado, este relato se ha acabado...