Que sí, que si que te acompaño Niko, que ya verás como tú padre y tú madre me dejan. Además, no vais todos a ver como tú padre la corre? pues le gustará saber, que su hijo, su pequeño gran hijo de 14 años, es capaz de caminar esos 17 preciosos kilómetros... venga, Niko, que ahora llamo a tú padre y se lo digo. ... y así fué, el 30 de junio hice el turno de la mañana en la piscina de Beniarbeig (por favor, no me pregunteis que hacía yo de socorrista, que no me quiero ni acordar !!) y sobre las 19 horas, estaba en la puerta de la casa de Amant para ir, junto con toda la familia, a dar la vuelta al Mondúver...

Llegamos a Xeraco, agarramos los dorsales y ale, comienza la caminata...

20.30 horas, Niko estaba nervioso, yo le contaba cosas, que si esto que si lo otro, que ahora tienes que aguantar, que ahora... bla bla bla ... 

Y sin darse apenas cuenta, ya había subido los primeros 6 km y nos encontrábamos en el 1er avituallamiento... agarramos agua, fruta y venga, que ahora es llanito.

Niko iba feliz, feliz y nervioso por que la noche ya se dejaba caer y él tenía algo de miedo.

Llegamos al 2º avituallamiento y encendimos los frontales...ahora, solo te queda ir detrás de mi y poco a poco no te me caigas, ok?

Hubo un par de sitios dónde le tuve que dar la mano y os prometo que eso me llenó de gran satisfacción. Era la primera vez que iba con un adolescente a un sitio tan duro y me encantó compartir esos 17 km al lado de este "hombrecito".

Al cabo de 2 horas, Niko ya se empezaba a encontrar cansado... pero yo le dije, si ya estamos y ya verás la cara de satisfacción de tú padre!!!

El me dijo, "Isabel, mi padre estará orgulloso de mi, verdad?" y yo le respondí, claro que si, lo estoy yo como para no estarlo él...

Asi que le dejé que pasara solo por el arco de meta y le dejé llegar solo a la zona dónde estaban sus padres esperándole.

SIMPLEMENTE ha sido todo un placer, mi pequeño gran Nicolau...